Conclusiones

  • El Cuadro 23, resume los promedios de los indicadores de cada componente de los criterios que SENASA utilizaba para evaluar las plantas procesadoras de leche y lácteos. Este resumen de indicadores determina que en promedio general más del 68 por ciento de las plantas no cumplen con los requisitos adecuados para producir productos lácteos saludables.

    Obsérvese, que entre los 11 criterios evaluados, 4 de estos eran los que en cierta medida más cumplían las plantas de leche, entre estos: el uso adecuado del «equipo de trabajo y la vestimenta» (56%); el control de la «higiene del personal» (49%); el «procesamiento del agua» (48%); y, contar con apropiadas «facilidades sanitarias» (44%). Por otro lado, entre los criterios más críticos que deben corregir las diferentes plantas, están: el apropiado «tratamiento de la leche», las condiciones de «higiene y orden de las bodegas»; el mantenimiento y limpieza de las «áreas externas a las plantas»; y, un adecuado equipamiento de instalaciones y aditamentos para el «ingreso a las plantas».

  • Con respecto a los componentes temáticos por situación de certificación, pre certificación y sin proceso de certificación de las plantas se puede concluir que las plantas certificadas en un 76 por ciento cumplen con los requisitos para la elaboración de productos lácteos saludables. Es decir que en promedio existe un 24 por ciento de plantas procesadoras de lácteos que han sido certificadas, pero que no cumplen con los criterios para producir productos de buena calidad y que sean saludables. Entre las características que no cumplen las plantas certificadas se encuentran que no realizan el «tratamiento a la leche» que procesan; poco mantenimiento, orden y seguridad en las «bodegas»; y algunos pequeños problemas en las «áreas de recepción de la leche», en el mantenimiento y aseo de las «áreas externas», y del «manejo de las guías sanitarias», (ver Cuadro 24).

  • En el caso de las plantas pre certificadas en promedio el 42 por ciento llenaban los requisitos para elaborar productos lácteos saludables. Los componentes que más cumplían estas plantas fueron: la «higiene del personal» (80%), el «procesamiento del agua» (70%), y mantenimiento de «la sala de procesamiento de la leche» (58%). Los componentes más críticos eran: no «tratamiento de la leche», inapropiado uso del «equipo y vestimenta» (70%), falta de mantenimiento a las «bodegas» (63%), problemas en las «facilidades sanitarias» (62%), y falta de mantenimiento de las «áreas externas a las plantas» (60%), (ver Cuadro 24).

  • Con respecto a las plantas sin ningún proceso de certificación, en promedio el 75 por ciento no cumplían con los diferentes criterios requeridos para la elaboración de productos saludables. Entre los componentes que menos cumplían las plantas eran: 100% no le daba «tratamiento a la leche», el 82 por ciento no hacían un uso adecuado del «equipo y vestimentas de trabajo» y el mantenimiento a las «áreas de recepción»; un 80 por ciento no hacían el apropiado mantenimiento de las «bodegas»; y un 76 por ciento no tenían las «facilidades sanitarias» adecuadas, (ver Cuadro 24).

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